Cada diciembre en la sierra de Atoyac, la comparsa La Morenita destaca con su participación llena de fervor y tradición. Formada por mujeres comprometidas, esta danza de chinelos, enriquecida con referencias guadalupanas, es un tributo lleno de fe y gratitud.
EL PARAÍSO; ATOYAC DE ÁLVAREZ. Durante las veneraciones a la Virgen de Guadalupe en la sierra de Atoyac, podemos observar una gran cantidad de jóvenes que salen a las calles cada diciembre para rendir tributo en agradecimiento. Sin duda, la conformación de grupos de la localidad ha enriquecido su identidad cultural y el compromiso de sus habitantes hace de estas manifestaciones ejemplo de difusión y preservación cultural. De entre ellos destaca un colectivo conformado por mujeres.
Entre 45 y 60 participantes femeninas – mujeres jóvenes, adultas y niñas – integran la comparsa “La Morenita” que participa activamente desde el 2018. Originalmente bajo el nombre de comparsa “Tzineloe” y teniendo como fundadoras a Adilene Tolentino, Lore Lagunas y Azalea Sotelo, este grupo de mujeres logró importar e incorporar a su celebración una danza que tiene sus orígenes en el siglo XIX: los chinelos; al vestuario característico de esta danza también le incorporaron algunas decoraciones y referencias guadalupanas.
Ellas han expresado que su participación es una forma de agradecimiento por todas las súplicas que han sido escuchadas, y por todos los milagros con los que han sido bendecidas. Más que un sacrificio, es una necesidad. De esta manera, el fervor, la sensibilidad y la apreciación artística se fusionan para una participación llena de gozo y una misión loable, pues son varios días y largas jornadas de caminata las que ellas están dispuestas a cumplir en honor a Nuestra Señora de Guadalupe. En su recorrido las acompaña la banda de viento “San Juditas”; juntos visitan al son de la música algunos nichos dedicados a la virgen y bailan para ella.
Actualmente, comparsa “La Morenita” está dirigida por Adilene Tolentino y Griselda Barragán.